El césped artificial ha ganado popularidad como una solución de paisajismo duradera y de bajo mantenimiento. Pero para asegurarse de que siempre esté en perfectas condiciones, hay que cuidarlo de forma adecuada.
El césped sintético es una excelente alternativa al césped natural, ya que requiere menos mantenimiento y ofrece un aspecto verde y fresco durante todo el año. Aunque esto no significa que el césped artificial no requiera cuidados para que tenga un aspecto bonito. Es verdad que no hay que regarlo todos los días ni pasar un cortacésped, pero al tratarse de un material, necesita ciertos cuidados para mantener su apariencia lo más realista posible y que dure muchos años.
La empresa Evolution Grass, expertos en césped artificial en Murcia, dan algunas claves para disfrutar de un césped en perfectas condiciones con los cuidados adecuados.
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¿Por qué es importante el mantenimiento del césped artificial?
A diferencia del natural, el césped artificial no se regenera solo con el paso del tiempo. Por eso necesita algunos cuidados periódicos para conservar su aspecto, textura y color originales.
Si no se realiza el mantenimiento adecuado, con el tiempo el césped sintético puede acumular polvo, hojas secas, manchas y otros elementos que le restan belleza. Incluso si se trata de una zona por la que se camina a menudo, se pueden aplastar las fibras y hacer que se vea desgastado.
Por eso es importante seguir una rutina de limpieza regular y mantenimiento, que no es demasiado complicada.
Hay que barrer con regularidad
Es importante barrer el césped artificial al menos una vez a la semana, mejor dos o tres veces si el tránsito es muy alto. Esto evitará la acumulación de residuos que pueden incrustarse entre las fibras.
Para barrer de forma adecuada, hay que usar un cepillo de cerdas duras y barrer en sentido de la fibra para eliminar el máximo de suciedad con facilidad.
En cuanto se vea una mancha, hay que limpiarla
Cualquier mancha de comida, bebida u otro elemento debe ser eliminada lo antes posible. Cuanto más tiempo permanezca sobre el césped, más difícil de quitar se hará.
Se puede utilizar un limpiador enzimático específico para este material, diluido en agua, para tratar las manchas. Se debe frotar con suavidad y enjuagar muy bien.
El césped artificial también necesita un poco de “riego”
Aunque no lo necesita para sobrevivir, rociar agua sobre el césped artificial ayuda a quitar el polvo acumulado. Una vez a la semana con la manguera o una regadera será suficiente.
El agua también ayuda a que las fibras se mantengan erguidas y no se queden aplastadas.
Desinfección periódica
Cada 3 o 4 meses, hay que añadir un poco de cloro al agua para eliminar gérmenes y evitar que aparezcan moho u hongos debido a la humedad.
Limpieza a fondo
Un par de veces al año, cuando se note que el césped está muy sucio, se recomienda hacer una limpieza más profunda. Pasar la aspiradora para levantar la mayor cantidad de polvo y residuos posible, y después usar un limpiador concentrado específico para césped artificial.
Una vez aplicado, hay que frotar con un cepillo y enjuagar con agua abundante, mejor con una manguera. Después, hay que dejar secar el césped por completo.
Protección contra el calor
El césped artificial está preparado para soportar el sol directo, pero no fuentes de calor más intensas como las brasas de una barbacoa. Por ello, si se tiene una hay que estar muy atento para que no caiga nada que pueda estropear el suelo. Lo ideal es poner la barbacoa en una zona aparte, o al menos colocar una base de baldosas para proteger el césped.
Con unos minutos y el cuidado necesario se puede disfrutar del césped artificial perfecto durante más tiempo.
