El programa de Atención Especializada en Violencia Sexual del Instituto Andaluz de la Mujer (IAM), dirigido a adolescentes víctimas de violencia de género que hayan sufrido agresiones y/o abusos sexuales por parte de sus parejas o exparejas, ha atendido en la provincia de Córdoba a 23 menores durante el primer semestre de este año, siendo la provincia cordobesa la que ha registrado el mayor número de menores atendidas en toda Andalucía.
Según los datos facilitados por el IAM, entre las ocho provincias andaluzas fueron atendidas durante este periodo un total de 113 menores y se prestó apoyo psicológico a 78 familiares y tutores legales. Tras los 23 casos de Córdoba, se registraron 17 en Sevilla, 15 en Cádiz, 14 en Huelva, 12 en Almería y Granada y 10 en Jaén y Málaga.
Este servicio, que se puso en marcha en 2018, forma parte de la ampliación del programa de Atención Psicológica a Mujeres Menores de Edad Víctimas de Violencia de Género, cuya finalidad es ofrecer una intervención psicológica especializada en violencia sexual para actuar de manera concreta con las chicas que la hayan sufrido, ya que se había detectado que algunas menores del programa de violencia de género habían vivido abusos y/o agresiones sexuales en su relación de pareja pese a no ser conscientes de ello cuando acudían a terapia.
Se trata de una violencia sexual invisibilizada, que inicialmente no reconocen las propias menores por desconocimiento de sus derechos, la normalización de la imposición de las relaciones sexuales y la insuficiente formación sexual de la juventud.
En concreto, el equipo de profesionales del programa, que atiende a adolescentes de entre 14 y 17 años prestándoles terapia psicológica gratuita y especializada, ha observado a lo largo de estos años que el sexo se utiliza en ocasiones como forma de violencia de género, ya que los chicos agresores someten a sus parejas a prácticas que no les agrada “como prueba de amor”, produciéndose de esta manera un falso consentimiento. Además, se ha detectado el fenómeno de la ‘pornovenganza’ y la ‘sextorsión’ cuando se rompe la relación.
De esta forma cuando se aprecia un abuso o agresión sexual, la terapeuta lleva a cabo una intervención psicológica individual, constituyéndose después grupos de terapia en función del perfil de las usuarias, además se ofrece orientación psicoeducativa a las familias. Así, hasta el mes de junio 113 menores han recibido atención especializada en violencia sexual, de las cuales 31 también han asistido a sesiones individuales. Mientras que el número de familiares atendidos es de 78, de los cuales 13 han recibido también consultas individuales.
Por lo tanto, entre menores y familiares, se ha dado cobertura a 191 personas durante el primer semestre constituyéndose ocho grupos terapéuticos con las adolescentes y otros ocho grupos de apoyo y orientación con las madres y padres de las menores.
El Instituto Andaluz de la Mujer tiene en marcha la campaña #AcudeEscuchaAcompaña, una iniciativa de sensibilización en materia de violencia sexual dirigida a la población en general, con el fin de promover el apoyo a las víctimas y el rechazo a toda actitud machista que justifique a los agresores. La campaña da difusión de todos los servicios que se prestan en Andalucía para atender a las víctimas de la violencia de sexual.