Objetivo cumplido. La tiradora baenense Fátima Gálvez volverá a estar en la próxima cita olímpica, en Tokio 2020, gracias a la medalla de bronce que ayer consiguió en el Trap (foso olímpico) femenino en los II Juegos Europeos que se están celebrando en Minsk (Bielorrusia).
A falta de la confirmación por parte de la Federación Española, esta será la tercera participación consecutiva de la deportista baenense en unos Juegos Olímpicos tras Londres 2012, donde fue quinta y Río 2016 que acabó en cuarta posición, rozando la medalla olímpica, el único reto que le falta en su exitoso palmarés.
Un billete olímpico por partida doble, porque una plaza la tendrá en la prueba individual y la otra en foso olímpico mixto, junto al toledano Alberto Fernández que ya consiguió con anterioridad una plaza individual masculina. Precisamente, la prueba de foso olímpico por equipos mixtos debutará en Tokio 2020 como modalidad olímpica.
Tras completar el sábado una brillante fase previa que finalizó liderando la clasificación, Fátima Gálvez mantenía su línea de acierto en la segunda ronda disputada en la matinal del domingo y aseguraba su pase a la final entre las seis mejores del campeonato, las italianas Jessica Rossi y Silvana Stanco, las finlandesas Satu Makela-Nummela y Marika Salmi y la eslovaca Zuzana Stefecekova.
En la final, los dos primeros cajones del podium se los disputaron las italianas Stanco y Rossi, oro y plata respectivamente, pero el bronce de la tiradora baenense le supo a oro, porque las dos tiradoras transalpinas ya habían asegurado su billete para Tokio, así que la única plaza olímpica que había en juego en este campeonato fue a parar a Fátima Gálvez, que no podía estar más contenta, como así ha transmitido a través de las redes sociales, mostrando su agradecimiento a su familia y toda la afición de Baena “que me han apoyado en estos días tan duros”.