Con motivo del Día Internacional del Migrante, celebrado ayer 18 de diciembre, desde Cruz Roja han querido mostrar el experimento social que han realizado en el marco del proyecto ‘La maleta invisible’ –financiado por el área de Cooperación del Ayuntamiento de Córdoba- para tratar de provocar esa empatía y recordar que luchar contra la discriminación es tarea de todos y todas.
Desde Cruz Roja insisten en que la mejor manera de empatizar “es ponernos en la piel del otro, tratar de estar en sus circunstancias para comprender y para hacernos reflexionar sobre otras realidades” y se han planteado “cómo podríamos derribar prejuicios que viven a diario la personas migrantes por el hecho de serlo y que atentan contra los Derechos Humanos”.
La institución humanitaria insiste en que no hablan “solo de racismo con mayúsculas”, sino también de los estereotipos cotidianos que muchas veces sin darnos cuenta o sin verbalizar aplicamos al que es diferente y subraya su “intento por mejorar, por alcanzar metas, la búsqueda de trabajo y del primer empleo como una etapa crucial en la vida”.
Por eso, han decidido hacer una acción, un experimento social, con estudiantes universitarios de Derecho/ADE de Córdoba para sensibilizarles acerca de la eliminación de prejuicios hacia las personas migrantes. Al fin y al cabo, aseguran, “ellos van a jugar un papel crucial en sus futuras vidas para defender los derechos, los Derechos Humanos de este colectivo, y de todos y todas en definitiva”.
El reto era ponerles en la piel, –por unos minutos y salvando las distancias– de la persona que se ve discriminada por su origen, su situación económica, sus creencias, su cultura, el color de su piel, sus rasgos o su lengua, con el fin de invitarlos a una reflexión sobre nuestros prejuicios y los estereotipos que“compramos” a veces sin mirar y que todos nos debemos plantear con sinceridad.
Solo en lo que va de año, Cruz Roja ha atendido a más de 3.600 personas desde su Programa de Inmigrantes –a través de los proyectos “Acogida e integración de personas inmigrantes” y “Atención a personas vulnerables en asentamientos”, ambos financiados por la Consejería de Igualdad, Políticas Sociales y Conciliación de la Junta.