Hormona que se libera al hacer el amor

Hormonas liberadas durante el ejercicio

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Recibido: 22 de junio de 2018Comienza la revisión por pares: 22 de junio de 2018Primera decisión: 3 de septiembre de 2018Revisado: 10 de septiembre de 2018Aceptado: 12 de octubre de 2018Artículo en prensa: 12 de octubre de 2018Publicado en línea: 22 de octubre de 2018

Las endorfinas son los opioides naturales del cuerpo que son creados y liberados por el sistema nervioso central, el hipotálamo y la glándula pituitaria. Las endorfinas tienen fama de reducir el dolor, aumentar la excitación o la satisfacción, potenciar la confianza, permitir el control de las emociones y generar sensaciones de euforia, y participan en el ciclo natural de recompensa. También hay pruebas en la literatura que sugieren el papel de las endorfinas en la sexualidad (incluyendo la función sexual y los comportamientos sexuales), ya que pueden regular la liberación de las hormonas sexuales, la prolactina y la hormona del crecimiento, que están involucradas en la función sexual y el amor. La oxitocina endógena es otra hormona intrínseca cuyo papel en la inducción de las contracciones del parto, el nacimiento del bebé y la estimulación de la lactancia ha sido bien estudiado. Sin embargo, no se conoce bien el impacto potencial de las endorfinas y la oxitocina en la sexualidad y las relaciones románticas. Este artículo revisa la investigación sobre las endorfinas y la oxitocina endógena y su relación con la sexualidad humana y las relaciones románticas. Algunos estudios sobre animales informan del efecto de las endorfinas y la oxitocina sobre las hormonas sexuales y los comportamientos de apareamiento, pero estos resultados no han sido respaldados por la investigación sobre el comportamiento humano, lo que indica que hay muchas lagunas en los conocimientos relativos a la asociación entre estas hormonas y la sexualidad humana.

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Oxitocina

El cuerpo humano libera potentes hormonas en el cerebro de hombres y mujeres durante la actividad sexual, entre ellas las neurohormonas oxitocina y vasopresina.    Las mujeres son más sensibles al efecto de la oxitocina, una hormona que también se encuentra como hormona de unión liberada durante el parto y la lactancia. Durante la actividad sexual, al liberarse la oxitocina, ésta “actúa como un superpegamento emocional entre la pareja”. Los hombres, por su parte, se ven más afectados por la vasopresina, que también “ayuda al hombre a establecer un vínculo con su pareja e infunde un instinto de protección hacia su pareja y sus hijos”.

Una forma de pensar en este efecto de unión del sexo es imaginar que estas hormonas son como una cinta adhesiva que une los brazos de una pareja. Tras una ruptura o después de cambiar de pareja, esa misma cinta adhesiva se arranca junto con algunas partículas de piel y pelo, lo que reduce su adherencia y la capacidad de unirse de nuevo a una nueva pareja. Del mismo modo, hay investigaciones que sugieren que cuando se liberan las hormonas del estrés, como puede ocurrir después de una ruptura, la capacidad de la oxitocina para crear vínculos de pareja se reduce, ya que los niveles de oxitocina descienden.    Las investigaciones también demuestran que los niveles de oxitocina aumentan hasta alcanzar la normalidad si se interrumpe la actividad sexual y se da tiempo para la curación emocional y física.

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Cuándo se libera la oxitocina en las hembras

La motivación sexual está influida por hormonas como la testosterona, el estrógeno, la progesterona, la oxitocina y la vasopresina. En la mayoría de las especies de mamíferos, las hormonas sexuales controlan la capacidad y la motivación para adoptar comportamientos sexuales.

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La motivación sexual puede medirse mediante diferentes técnicas. Las medidas de autoinforme, como el Inventario de Deseo Sexual, se utilizan habitualmente para detectar los niveles de motivación sexual en los seres humanos. Las técnicas de autoinforme, como la tubería falsa, pueden utilizarse para garantizar que los individuos no falsifiquen sus respuestas para representar resultados socialmente deseables. La motivación sexual también puede examinarse implícitamente a través de la frecuencia del comportamiento sexual, incluida la masturbación.

La testosterona parece ser un factor importante que contribuye a la motivación sexual en los primates masculinos, incluidos los humanos. Se ha demostrado que la eliminación de la testosterona en la edad adulta reduce la motivación sexual tanto en los humanos como en los primates machos[1] Los humanos machos a los que se les suprimió la función testicular con un antagonista de la GnRH mostraron una disminución del deseo sexual y de la masturbación dos semanas después del procedimiento[2] Las investigaciones realizadas con monos rhesus machos sugieren que la testosterona funciona para aumentar la motivación sexual, motivando así a los machos a competir por el acceso a las parejas sexuales. Se postula que los efectos motivadores de la testosterona en los monos rhesus macho promueven el éxito de la competición sexual y pueden ser herramientas motivadoras especialmente importantes para los machos de bajo rango[2]. Es importante señalar que la eliminación de la testosterona en los primates no reduce la capacidad de copular, sino que reduce la motivación para hacerlo.

Efectos de la oxitocina

¿Recuerda la primera vez que vio a su pareja, a su cónyuge o a cualquier persona que le atraiga? ¿Recuerda lo que sintió? Sea lo que sea (es decir, mariposas en el estómago, sensación de hundimiento o chispa de química), una hormona fascinante parece ser la causante de esa “extraña” sensación.

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También llamada “hormona del amor”, la oxitocina es una hormona natural y un neurotransmisor que se produce en el hipotálamo y se transmite al torrente sanguíneo a través de la glándula pituitaria. La hormona se libera durante el parto, las relaciones sexuales y la lactancia para ayudar a las funciones reproductivas.

La “hormona del amor” tiene un papel importante en las interacciones sociales y la reproducción sexual. Un estudio de 2012 reveló que las personas en las primeras etapas del apego romántico tenían niveles más altos de oxitocina, y los niveles duraban al menos seis meses. Asimismo, la hormona también se estimula durante la actividad sexual y los orgasmos.

Cuando la hormona se libera en determinadas partes del cerebro, puede afectar a las emociones y a los comportamientos cognitivos y sociales. La oxitocina desencadena sentimientos de amor y protección, que se producen de forma natural cuando padres e hijos se miran a los ojos o cuando se abrazan. Otros efectos que mejoran las relaciones son la empatía, la confianza y el procesamiento de las señales de unión.