La organización Ecologistas en Acción ha dado a conocer un informe en el que revela que la tasa de depuración de aguas residuales en la provincia de Córdoba es la segunda mejor de Andalucía, si bien ha bajado un punto con respecto al año anterior y ya no es la que más cumple entre las ocho provincias andaluzas.
Asimismo, en este informe los ecologistas han avisado que en toda la Comunidad Autónoma, sólo las provincias de Cádiz, Huelva y Jaén mejoraron en 2018 los porcentajes de cumplimiento de la normativa por parte de sus depuradoras respecto al año 2017, siendo la provincia jiennense la más cumplidora, con un porcentaje cercano al 86%.
Por tanto, Córdoba se sitúa ahora como la segunda mejor provincia respecto al porcentaje cumplimiento de la normativa y conformidad de las depuradoras analizadas con casi un 80%, tras descender la tasa de cumplimiento en un punto y ser superada por Jaén.
El informe de Ecologistas destaca que las depuradoras que cumplen con la normativa en la provincia de Córdoba son casi una treintena, entre las que se encuentra la EDAR de Baena, junto a las de Adamuz, Aguilar de la Frontera, Belalcázar, Bujalance, Cabra, Carcabuey, Cardeña, Castro del Río/Espejo, Córdoba-La Golondrina, El Carpio/Pedro Abad, Espiel, Fernán Núñez, Hornachuelos, Iznájar, Lucena, Luque, Montemayor, Montilla, Montoro, Nueva Carteya, Palma del Río, Pedroche, Priego de Córdoba, Puente Genil, Villa del Río, Villafranca de Córdoba, Villanueva de Córdoba y Villaviciosa de Córdoba)
Por el contrario, son pocas las depuradoras cordobesas no conformes, aunque una parte de ellas siguen dando problemas desde el año 2013, donde Ecologistas en Acción comenzó a analizar las analíticas. Son los casos de Añora/Dos Torres y Peñarroya/Pueblonuevo, donde la solución a los problemas de incumplimiento pasan por construir una nueva depuradora.
En el primer caso está pendiente su adecuación y mejora por parte de la Administración andaluza que la declaró de interés en 2010 y en el segundo caso, necesita una ampliación de la existente para que se implante un tratamiento terciario que elimine la carga orgánica residual y aquellas otras sustancias contaminantes no eliminadas en los tratamientos secundarios como por el nitrógeno y el fósforo, ya que además se sitúa en la zona sensible Embalse de Sierra Boyera.
FUENTE: CORDÓPOLIS