Ecologistas en Acción de Baena ha criticado el “silencio” que tanto desde la alcaldía como de la empresa Politejo han venido guardando desde el incendio ocurrido el pasado día tres de junio en su fábrica de Baena y ha insistido en que “esto es un ejemplo más de cómo los intereses comerciales y económicos están por encima de la salud de las personas y el medio ambiente”.
Desde Ecologistas en Acción afirman que “el incendio ha supuesto la expulsión a la atmósfera y el medio ambiente de gran cantidad de gases contaminantes y a día de hoy los ciudadanos de Baena seguimos sin tener una información más detallada y necesaria de lo que ha ocurrido”.
Para la formación ecologista, “resulta llamativo y muy poco tranquilizante que un incendio donde se han quemado varias toneladas de tubos de plásticos de diferentes tipos pero todos altamente contaminantes, no es ni mucho menos para que los ciudadanos estuviéramos tranquilos”.
Desde Ecologistas se preguntan cómo se inició el fuego o qué hubiese pasado si el viento sopla en dirección sur y llega hasta la población que se encuentra a unos cinco kilómetros, así como si la empresa tiene un protocolo de evacuación o seguridad. Por todo ello, insisten en que “no vamos a saber que ha pasado realmente” por lo que “estamos ante un silencio cómplice por parte de Politejo y el alcalde, ya que a estas alturas deberían haber aclarado a toda la población las causas que provocaron el incendio”.
El portavoz de la formación Ecologista en Baena, Francisco Ordóñez, ha afirmado que “no debemos de olvidar que la mayoría de los tubos que se fabrican en Politejo son derivados del petróleo” y ha alertado que “por ello la población ha estado en riesgo por mucho que los responsables sigan callados y no quieran dar más explicaciones”.
Por tanto GRODEN-Ecologistas en Acción exige que “den la cara”, porque si no estaríamos asistiendo “a un insulto y un desprecio al medio ambiente y a la población de Baena que muy a menudo tiene que soportar de las empresas que tenemos en los alrededores: malos olores, humos, incendios, derrames de alpechines y aguas mal depuradas vertidas a los ríos”.