El año hidrológico 2018/2019 que se cerró ayer, 30 de septiembre, se ha caracterizado por una preocupante falta de lluvias que ha dejado en Baena unos datos de pluviometría y reservas hidrológicas ciertamente alarmantes. Las lluvias registradas desde el 1 de octubre de 2018 al 30 de septiembre de 2019 han dejado 364 litros por metro cuadrado (l/m2) según los datos facilitados por la Sociedad Recreativo Cultural ‘Casino de Baena’.
Analizando los datos mensuales de precipitaciones, el mes más lluvioso de este año hidrológico fue octubre con 75 l/m2, seguido de noviembre con 70, abril con 65 y enero con 62,5. En este último mes de septiembre se han registrado 42,5 l/m2. En el lado contrario están los meses de mayo, junio, julio y agosto en los que tan solo se recogió en total 1 l/m2 y fue en junio. En cuanto a las temperaturas, el día más caluroso fue el pasado 11 de julio que se alcanzó 40,6º mientras que la temperatura más baja se registró el 11 de enero con -2,9º.
De otro lado, a día de hoy, 1 de octubre, el pantano de Vadomojón se encuentra en uno de sus niveles más bajos de los últimos años, a tan solo el 27,64% de su capacidad, almacenando un total de 45,06 hectómetros cúbicos (hm3) de agua sobre los 163 de su capacidad máxima.
Un nivel muy por debajo del 57%, con 93 hm3 que acumulaba a primeros de octubre del año pasado y también, ligeramente inferior a la media que acumulan los pantanos cordobeses que ya han bajado del 30%, según los datos recabados por Televisión Baena a través del Servicio Automático de Información Hidrológica (SAIH) de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG).
De este modo, la provincia de Córdoba inicia el año hidrológico 2019-2020 en situación de “prealerta” tras un año marcado por la escasez de precipitaciones. Los pantanos cordobeses se encuentran a día de hoy con unas reservas que apenas superan los 1.000 h/m3 (1.013) sobre los 3.411 de capacidad máxima de la provincia.
Se trata de un porcentaje similar al del 1 de octubre de 2017, en plena sequía, cuando los embalses apenas rozaban un alarmante 28%, y 18 puntos por debajo de 2018, cuando se situaban al 47%. La media en la misma semana en la última década es del 58%, lo que da cuenta de la gravedad de la sequía existente tras unos meses especialmente secos que, desde el punto de vista hidrológico, han salvado únicamente los azotes de la pasada gota fría.