Los presidentes de las diputaciones de Córdoba, Antonio Ruiz; Granada, José Entrena; y Jaén, Francisco Reyes, se han reunido con la intención de reactivar la Mesa de Trabajo por la Autovía A-81 y han vuelto a pedir a José Luis Ábalos, ahora ministro de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, una reunión con la citada plataforma con la intención de que se incluya esta infraestructura entre las prioridades del nuevo Gobierno.
Los presidentes, todos socialistas, consideran que esta arteria de comunicación tiene un carácter estructural para estas tres provincias y sus municipios y se convierte en un eje fundamental sobre el que articular el desarrollo socioceconómico de las comarcas afectadas, la lucha contra el despoblamiento, además de por la mejora de la seguridad vial.
Esta petición de reunión con la intención de incluir en la agenda del Gobierno este proyecto no es nueva, pues cada vez que toma posesión un nuevo ejecutivo, bien en la Comunidad Autónoma bien en el Estado, en cada provincia se reactivan las reivindicaciones pendientes de anteriores legislaturas. En Córdoba, entre algunas otras, destaca la larga demanda de conversión de la carretera N-432 en autovía.
Se trata de una carretera con un alto nivel de tránsito de vehículos, pues conecta, pasando por Córdoba y Jaén, la zona oriental de Andalucía con Extremadura y, desde allí, con Portugal. Es asimismo la segunda vía que acumula el mayor índice de accidentes de cuantas atraviesan la provincia y, por último, la que conecta con la ciudad las comarcas más distantes y que más dificultades económicas y de despoblamiento presentan de toda la geografía cordobesa.
En total, esta carretera pasa por 25 localidades de cuatro provincias (tres andaluzas y una de Extremadura) a lo largo de sus más de 400 kilómetros. Además, desde las diputaciones de Córdoba y Granada se argumenta que estas dos ciudades son las únicas capitales de provincia de Andalucía que no están unidas por autovía. Por esos y otros motivos, la demanda de la conversión en autovía, la futura A-81, es una reivindicación que en las dos últimas décadas ha dado lugar a constantes movilizaciones tanto de ciudadanos como de organizaciones políticas y sociales, no solo de Córdoba sino también de Badajoz, Jaén y Granada, que van desde la recogida de firmas a los cortes de tráfico.
En el sur de Córdoba, en la zona del Guadajoz y la Subbética se han unido empresarios y organizaciones sociales para que se acelere el proyecto, y en los últimos meses han protagonizado varios cortes de carretera. En la zona norte de la provincia existe una plataforma que también ha protagonizado, junto con los pueblos cercanos de Badajoz, algunos actos en demanda del proyecto.
La plataforma extremeña asegura que cada quince días se produce un accidente grave en la citada vía y en la provincia de Córdoba, año tras año la Badajoz-Granada aparece como la segunda carretera que más accidentes registra.
Pero junto a todo ello, desde la Diputación de Córdoba se alentó la creación de una plataforma en la que se integran ayuntamientos y diputaciones de las provincias por las que discurre la carretera para trabajar por que el Gobierno apueste por esta infraestructura que se considera fundamental. Esta mesa de trabajo se ha reunido en varias ocasiones y desde su puesta en marcha (la mesa de constituyó oficialmente en enero del 2017) han pasado por la Moncloa gobiernos del PP, con Mariano Rajoy, y del PSOE, con Pedro Sánchez, que ahora repite.
A todos los ministros de Fomento la denominada Mesa de Trabajo por la Reconversión de la N-432 en Autovía A-81 ha solicitado reuniones, con la intención de que se reactive un proyecto que en su momento fue paralizado al no superar los condicionantes medioambientales y que ha sido incluido en dos planes de infraestructuras, primero con el horizonte 2020 y luego con el del 2024 sin que todavía haya visto la luz.
FUENTE: DIARIO CÓRDOBA