La Unión Europea y Australia firmaron hoy un acuerdo aéreo que permitirá a las compañías comunitarias realizar conexiones entre cualquier Estado miembro, y no sólo el país en el que están basadas, y Australia. El tráfico aéreo entre las dos zonas supera los cuatro millones de pasajeros al año.
El vicepresidente de la Comisión y responsable de Transportes, Jacques Barrot, aseguró a través de un comunicado que este pacto abre la vía a un acuerdo más amplio de ‘cielos abiertos’ que permita aumentar la cooperación entre la UE y Australia en materia de competencia, seguridad y medio ambiente.
El pacto firmado este martes suprime las restricciones basadas en la nacionalidad presentes en los acuerdos bilaterales entre los países de la UE y Australia. De esta manera, se reconoce la existencia de un mercado único europeo del transporte aéreo y también que las aerolíneas de la UE ya no tienen un carácter nacional, sino comunitario.
El acuerdo no sustituye a los pactos bilaterales sobre aviación en vigor entre los Estados miembros y Australia, sino que simplemente garantiza su conformidad con el derecho comunitario, que prohíbe la discriminación por razón de nacionalidad. El Ejecutivo comunitario ya propuso en septiembre de 2005 iniciar con Australia negociaciones para un acuerdo aéreo más amplio, y esta propuesta está pendiente de aprobación por los Veintisiete.
Estas negociaciones tendrían como objetivo concluir un pacto aéreo innovador basado en dos objetivos inseparables: la apertura de los mercados para aumentar las oportunidades de las empresas de la UE, y la convergencia de la normativa y la cooperación en dominios como la seguridad, la protección del medio ambiente o las reglas de competencia.