El verano para los niños y niñas de Albendín está siendo un “descanso relativo”. Durante todo el periodo estival están disfrutando de lunes a viernes de un gran número de actividades deportivas y juegos desde primera hora de la mañana.
La cita es en las instalaciones deportivas. Allí, todos los inscritos en la escuela de verano, divididos en tres grupos por edades y por espacios, realizan un calentamiento antes de comenzar con los juegos. Los más pequeños se divierten con el juego de las ovejas y el lobo, el comecocos o el pañuelo, también con el baile de la estatua y practican rugby. Para el grupo intermedio y el de mayores se han diseñado juegos como ‘quema’, ‘declaro la guerra’ o futbeisbol y béisbol, además del comecocos.
De 9:45 a 10:00 toca parada para desayunar en la que el avituallamiento es “un desayuno sano”. Tras el bocadillo, los más pequeños desarrollan su coordinación aprendiendo coreografías y bailes en el merendero de la piscina y el pabellón. Los medianos y mayores comienzan las actividades deportivas. Practican baloncesto, pádel, balonmano y fútbol sala.
A media mañana las actividades se trasladan a la piscina. Los más pequeños realizan juegos acuáticos hasta la llegada de los demás grupos, momento en el que se trasladan al césped donde continúan con los juegos. La jornada termina para ellos con actividades de relajación en el agua.
El grupo intermedio y el de mayores combinan actividades lúdicas y deportivas en el agua. Así practican buceo, waterpolo o natación, deben superar retos y también tienen tiempo de disfrutar de la piscina con libertad.
Todas las actividades están pautadas y se sigue un riguroso cumplimiento de los horarios con el objetivo de que todos los grupos puedan aprovechar al máximo el tiempo y las instalaciones.
Una vez terminada la jornada son los propios monitores los que se encargan de limpiar las instalaciones y recoger todo el material.